La sequía desata tres crisis: eléctrica, de producción agropecuaria y de distribución de agua potable
La sequía por la ausencia prolongada de lluvias provoca al menos tres crisis en Ecuador que complican la vida a los ciudadanos.
Si bien es normal que en agosto y septiembre disminuyan las precipitaciones, pero no al punto que se ha registrado en este año, por ejemplo, solo en este mes hay un 80 % de déficit de lluvias.
Frente a ese escenario, el gobierno reconoció que era necesaria la programación de los cortes eléctricos a escala nacional, para precautelar la infraestructura de las hidroeléctricas; mientras que los municipios, en al menos ocho provincias, comenzaron los racionamientos del agua potable; a la par que los productores agropecuarios ya sienten los estragos de la falta de riego para sus cultivos y para el alimento del ganado, lo que provoca un incremento de precios en ciertas frutas, verduras y carnes.
La temporada de apagones comenzó, oficialmente
La alerta de que el Gobierno debería programar apagones por los bajos niveles de los embalses en las hidroeléctricas estaba latente desde hace un mes, cuando comenzaban a sentirse los primeros efectos del estiaje.
Ahora ya es una realidad. Este 18 de septiembre será el primer corte programado de luz, desde las 22:00 hasta las 06:00 del jueves 19. Según el gobierno, esa interrupción del suministro de electricidad tiene por objetivo el mantenimiento de los sistemas de transmisión.
Sin embargo, ese no va a ser el único apagón, también están programados para la siguiente semana, desde el lunes 23 de septiembre al jueves 26, a escala nacional, en el mismo horario. Luego, habrá que ver cuál es el plan del Gobierno, porque las primeras lluvias, que están previstas para finales de septiembre, no serán suficientes para solucionar el problema, de hecho, expertos creen que podría extenderse hasta finales de diciembre.
En el sur del país se encuentran cinco hidroeléctricas. En esa zona no se presentan lluvias desde hace 67 días. La cota de Mazar, la presa que alimenta a las centrales de Mazar, Molino y Sopladora, cada día desciende más y el nivel mínimo para su funcionamiento es de 2 115 metros sobre el nivel del mar (msnm), hasta el 16 de septiembre se encontraba en 2 122, 27.
Cortes de agua potable en al menos 8 provincias
El bajo nivel en las fuentes de agua de las ciudades del país ha provocado que las empresas municipales, encargadas del abastecimiento, programen racionamientos, por lo menos en nueve provincias de Ecuador, la mayoría en la Sierra: Carchi, Imbabura, Pichincha, Cotopaxi, Azuay y Tungurahua; en la Costa, El Oro; y en la Amazonía, en Pastaza.
Los cortes son principalmente durante la noche y madrugada.
En Quito, provincia de Pichincha, se estableció un cronograma que afecta a los sectores de La Merced, Alangasí, San Antonio de Pichincha, Calacalí, Guápulo, Itchimbía, Alpahuasi, Argelia, Edén del valle, Pomasqui, entre otros. El corte está previsto de 19:00 a 07:00, en días específicos, desde el martes 17 de septiembre hasta el domingo 22.
En Ibarra el servicio se suspende hasta 10 horas, en 12 sectores. En Cuenca se establecieron interrupciones de dos o tres horas. En Pujilí, los cortes duran hasta 20 horas. En Ambato son de once horas.
En El Guabo los cortes son más espaciados, cada dos días; mientras que en Mera, provincia de Pastaza, hay zonas en donde se distribuye el líquido en tanqueros.
La escasez en los mercados y los problemas en la producción agropecuaria
Hasta la fecha, más de 7 700 hectáreas de cultivos han sido afectadas por la sequía, según informó el ministro de Agricultura y Ganadería, Danilo Palacios, en Contacto Directo.
Eso significa que productos, que se cosechan principalmente en la Sierra, han aumentado los precios en los mercados, aunque según la autoridad todavía no hay desabastecimiento.
Las plantaciones de mayor afectación son las de tomate, con 600 hectáreas que se han perdido. En el mercado se puede encontrar este vegetal en casi el doble del precio, hasta dos pequeños por USD 1.
En la papa ocurre lo mismo. Dependiendo del lugar, el quintal podía costar hasta USD 30, ahora llega hasta USD 45. Bolívar Castellanos es productor en Machachi, cuenta que su riego se nutre de un pozo que comparte con otras propiedades de la zona, sin embargo, el nivel ha disminuido y teme que al corto plazo tenga que buscar otra fuente de agua. Su producción ha disminuido, antes obtenía 350 quintales por hectárea, ahora llega a 270.
Ramiro Pilicita es pequeño productor de zanahoria en Latacunga y cuenta que en la última cosecha que hizo sacó producto de baja calidad, pues la raíz ya no crece igual. Tiene que aumentar a casi el doble para solventar los gastos que le representan el riego.
En cuanto al ganado vacuno, el Centro de la Industria Láctea dice que no hay novedades en la producción, sin embargo, los efectos se sienten en pequeños productores que reportan enfermedades en los animales que no tienen suficiente alimento, agua y sombra.
Fuente: Ecuavisa