Ecuador está desplazando a Colombia en el envío de cocaína a Europa
La pandemia de Covid-19 tuvo un efecto disruptivo en los mercados de la cocaína. O, en términos más sencillos, los alteró porque la severa reducción en los viajes internacionales ocasionó dificultades para que los productores ubiquen la droga en los mercados.
Además, los clubes nocturnos y los bares cerraron cuando se intensificaron los intentos por controlar el virus y eso provocó una caída en la demanda de drogas como la cocaína que, a menudo, se asocia con esos entornos.
Esa es una de las principales conclusión a las que llega la Oficinal de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) en reporte global 2023, sobre el mercado de la cocaína.
Sin embargo, los datos presentados sugieren que estas variables tendrán poco impacto en las tendencias a largo plazo. Esto se evidencia, por ejemplo, en los datos de producción.
La oferta global de cocaína está en niveles récord: casi 2.000 toneladas se produjeron en 2020, siguiendo con una tendencia al alza que comenzó en 2014. Ese año, el total de producción era menos de la mitad de los niveles actuales. El aumento se debe, en parte, a la expansión del arbusto de coca.
Este cultivo se duplicó entre 2013 y 2017, alcanzando su punto máximo en 2018 y volviendo a aumentar considerablemente en 2021. Otra causa de este incremento son las mejoras en el proceso de conversión de arbusto de coca en clorhidrato de cocaína.
A la par del aumento en la producción, explica la Unodc, ha habido un crecimiento continuo en la demanda. La mayoría de las regiones del mundo muestran un aumento constante en el número de usuarios en la última década.
Desde Ecuador, por el mar Según el reporte 2023 de la Unodc, Ecuador es un “importante país de salida de la cocaína” porque “desde su territorio hay varios puntos de partida, a través de al menos tres rutas marítimas desde Guayas, Esmeraldas y Manabí”.
Una vez que las embarcaciones, que salen desde Ecuador y otros puntos, alcanzan o se acercan a la costa del Pacífico de América Central, la cocaína suele transferirse a otra embarcación marítima para continuar hacia el norte a lo largo de la costa.
El documento reconoce que las rutas aéreas aún no son predominantes en Ecuador. Aunque se han observado algunos vuelos clandestinos a lo largo de la costa del Pacífico de Centroamérica, algunos que parten de Ecuador a varios destinos, este modo de transporte parece ser más pronunciado a lo largo de la costa este (Caribe).
Las rutas
Los informes de los Estados entregados a la ONU, sobre el país de procedencia de la cocaína incautada por sus autoridades, en general, confirman la importancia, a escala mundial, de Colombia, Perú y Bolivia, en ese orden, como países de origen de la cocaína.
Además de abastecer sus mercados internos y los de los países vecinos, como Ecuador, la cocaína se trafica desde estos tres países en varias direcciones, a menudo a través de largas distancias, para llegar a los consumidores de todo el mundo.
Por ejemplo, desde Colombia, la cocaína sale por varias rutas:
- Por la costa del Pacífico de Colombia: Rumbo al norte hacia América Central y del Norte.
- Por Ecuador: De donde sale la cocaína, a través de una variedad de modalidades, a diferentes destinos, incluyendo Europa. Así como una ruta hacia América Central y del Norte.
- Por Perú
- Por la costa atlántica, en el flanco oriental de Colombia: Especialmente a través de Venezuela y, en cierta medida, a través de Guayana y Surinam.
- Por Brasil: Por sus cursos de agua que conducen a la costa atlántica.
- Frontera terrestre entre Colombia y Panamá
Ecuador no aparece, únicamente, en las rutas desde Colombia. La Unodc también lo señala en la ruta desde Perú.
Europa es el destino
Por otro lado, el organismo reporta que Ecuador ha cobrado importancia en los últimos años como punto de partida de los cargamentos de cocaína, especialmente, con destino a Europa.
Con base en los informes de las autoridades aduaneras a la Organización Mundial de Aduanas, la cocaína enviada a Europa Occidental desde Sudamérica cada vez sale más de Ecuador.
La proporción pasó del 14%, en 2018; al 29%, en 2020; y al 28%, en 2021. Además, según las incautaciones policiales, la proporción de cocaína destinada a Europa desde Ecuador aumentó de 9%, en 2019; a 33%, en 2021.
Lo que significa un aumento a más del 50%, cuando solo se cuentan los casos en los que se conocía el destino.
El comercio hacia estas latitudes se realiza en contenedores, que siguen siendo utilizados por los grupos delictivos.
Estos aprovechan la posibilidad de ocultar grandes cantidades de droga dentro de mercancías legítimas o dentro de la estructura del contenedor.
Fuente: Primicias